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Día de la mejor edad: una vida sin dolor

La polimialgia reumática se diagnostica con frecuencia en personas mayores, pero eso no puede ser un factor determinante que deteriore la calidad de vida

El 1º de octubre se celebra el Día Internacional de las Personas Mayores y, como a cualquier edad, uno de los factores más importantes es la calidad de vida y la salud. Y debemos hablar de las enfermedades reumatológicas.

No es raro que las personas mayores empiecen a quejarse de dolores en las extremidades superiores e inferiores, el cansancio extremo se apodere de ellas y el desánimo las abrume, lo que tiene consecuencias en todos los aspectos de la vida de esa parte de la población.

Según el Dr. Felipe Mendonça, reumatólogo de Imuno Brasil, las quejas de dolor en las articulaciones, así como dolor en otras partes del cuerpo, son comunes en la vejez, pero no debemos dejar pasar las cosas sin un diagnóstico eficaz – después de todo, cuando las enfermedades reumatológicas se detectan temprano, pueden ser tratadas con mayor eficacia.

El dolor de las personas mayores no debe infradiagnosticarse ni infravalorarse, sino que debe tratarse con cuidado y resolución. Y una de las enfermedades más comunes en estos casos es la Polimialgia Reumática. El tratamiento es sencillo, siempre y cuando se haga el diagnóstico con antelación y se inicie el tratamiento.

El doctor explica que la enfermedad afecta a personas de más de 50 años, pero es más frecuente a partir de los 70.

Aunque la enfermedad se caracteriza principalmente por dolores articulares, hasta en un 10% de los casos puede derivar en una grave inflamación de los vasos denominada Arteritis de Células Gigantes, que a su vez puede provocar pérdida de peso, dificultad para comer e incluso ceguera total. Por lo tanto, el diagnóstico oportuno es esencial tanto para mejorar la calidad de vida como para evitar la progresión a formas más graves.

La polimialgia reumática se caracteriza por una enfermedad inflamatoria sistémica que afecta a los tejidos musculoesqueléticos, con mayor frecuencia a las articulaciones del hombro y la cadera. Los síntomas son dolor y rigidez en las zonas afectadas.

Debido al proceso inflamatorio, los síntomas son más severos por la mañana e incluso pueden provocar fiebres intensas. Con un diagnóstico clínico, la enfermedad debe tratarse con corticoides lo antes posible para evitar que evolucione a una Arteritis de Células Gigantes, que, como ya se ha mencionado, puede causar ceguera en el 20% de los casos.

Las personas mayores merecen diagnósticos precisos y rápidos, después de todo, tienen derecho a mantener la calidad de vida para disfrutar de su mejor edad.

Sobre el doctor: reumatólogo de Imuno Brasil, Felipe Mendonça de Santana se graduó en medicina en la Universidad Federal de Pernambuco (2012), con residencia en Medicina Interna y Reumatología en la Facultad de Medicina de la Universidad de São Paulo (FMUSP), donde también trabajó como preceptor en Reumatología, así como en el Hospital dos Servidores Públicos del Estado de São Paulo.